Barrio la Guita

Un hundimiento y nuevas grietas alarman a los vecinos de La Guita

Vecinos de La Guita, en la zona del cordobés barrio del Sector Sur, y directivos de la asociación de vecinos Huertos Familiares han mostrado su temor por el acelerado deterioro de los edificios, construidos hace medio siglos por un patronato y en los que se han vuelto a abrir grietas, además de detectarse desperfectos como un hundimiento junto al bloque número 36 de la calle Loja, que fue desalojado hace dos años por el riesgo que presentaba su estado.

Según el vocal de infraestructuras de la asociación vecinal, Manuel Sierra, el visible deterioro de los edificios hace que las medidas anunciadas por las administraciones no tranquilicen a los residentes en la zona. Al respecto, la Junta encargó un informe que terminó demostrando la viabilidad de la reparación del bloque desalojado

MANOS A LA OBRA Por su lado, responsables de Vimcorsa mantuvieron el pasado miércoles una reunión con los vecinos para informarles de los programas de ayuda para rehabilitar las viviendas y, sobre todo, de un proyecto para consolidar el subsuelo de La Guita. Según informaron ayer fuentes de Vimcorsa, se trata de una intervención que drenará el terreno de aguas subterráneas acumuladas (bien por la lluvia o por el deterioro de las redes de abastecimiento y alcantarillado), lo que contribuirá a consolidar los cimientos de las construcciones. Esta intervención, que según las citadas fuentes comenzará esta semana, se costeará con los fondos anticrisis del programa especial del Gobierno central y ha tenido un presupuesto de licitación de 180.616,21 euros.

Los vecinos, pese a las explicaciones de las administraciones, no se mostraban ayer tranquilos. «El socavón que ha salido en el bloque 36 fue donde hicieron en agosto una cata para ver los cimientos. La taparon y ahora se ha hundido y han salido más grietas. Y en mi bloque, siguen las mismas», decía ayer María Teresa Pérez, recordando que en los bloques 10, 14 y 16 de la calle Loja y en el 7 de la calle Punta Umbría aparecieron hace tiempo unas inquietantes fisuras, aunque los técnicos municipales no consideraron que los vecinos estén en peligro.

El informe geotécnico que encargó la Junta determinó a finales del pasado mes de noviembre que es posible y rentable la reparación de las grietas de los edificios dañados, así como la reforma del desalojado bloque 36 de la calle Loja.

Fuente:  Diario Córdoba

Apuntes de historia

El vecino del Campo de la Verdad que fundó Madrid

Muhammad I el Omeya heredó el emirato, los conflictos mozárabes y los fronterizos; combatió con el primer bandolero andaluz, llegó hasta los Pirineos y fundó la futura capital de España

EN el harén de Abderramán II, el más apasionado y fecundo de los emires y califas cordobeses, tan sólo las muchachas vírgenes tenían cabida y fueron miles las que habitaron la estancia más oculta del palacio. Entre ellas estaba la joven Buhayr, convertida en madre de príncipe en el año 823. El niño, a quien impusieron el nombre de Muhammad, estaba llamado a ser el sucesor al trono aún a pesar de las intrigas de la astuta Tarub, la sultana que dedicó talento, poder y sus relaciones con los eunucos en convertir a su hijo, el príncipe Abdallah, en emir.

Como el resto de los 45 varones, de los casi cien hijos atribuidos a Abderramán II, Muhammad I debió crecer en las dependencias califales. Siguiendo la tradición, las maestras, sabias y poetisas le enseñaron las primeras letras, la poesía y las matemáticas, a las que dedicó buena parte de su tiempo; por ello alcanzó ganada fama de hombre culto e inteligente. No así su hermano Abdallah, cuyas costumbres livianas despertaban recelos dentro y fuera de la corte.

En el anochecer del 22 de septiembre de 852 un ataque de apoplejía provocó que el emir «echara el alma por la boca», dice Ibn Hayyan o -en versión de San Eulogio- sufriera la ira del dios cristiano, mientras contemplaba, ahorcados, a Emilia y Jeremías. Nadie, salvo los eunucos, habían sido testigos del fallecimiento de Abderramán II. De modo que decidieron mantenerlo en secreto hasta elegir al heredero. Los partidarios de Abdallah no lo eran tanto por unos méritos de los que carecía el pretendiente, cuanto por el temor a contrariar a la poderosa Tarub. Finalmente se escuchó la opinión del eunuco Abu-´l-Mofrih, partidario de Muhammad.

El siguiente paso era trasladar al príncipe en secreto hasta el alcázar real, donde tenía la residencia su rival, Abdallah. Para ello, relata Dozy, el eunuco «Sahún se llevó las llaves de la puerta del puente; pues el palacio de Mohammed se hallaba a la otra parte del río» y tras vencer la desconfianza del candidato, decidieron introducirlo en el palacio bajo atuendos de mujer. Sirvieron las ropas de su propia hija, a quien el abuelo Abderramán, hacía llamar a su lecho alguna vez. Al hacerse pasar por ella, el soldado de guardia no osó levantarle el velo. Así fue como con el anunció de la muerte del emir, se publicó también el nombre de su sustituto.

Aquel poeta y matemático de 29 años, era también frío, calculador, poco piadoso y demasiado débil como mandatario, a juicio de la corte y del pueblo. Quizá para amortiguar esa fama, tomó drásticas medidas, como apartar a todos los cristianos de la corte y acrecentar la persecución contra los mozárabes. Algo que confirma San Eulogio: «Mohamed, enemigo de la Iglesia de Dios y malévolo perseguidor de los cristianos. Heredó con sangre el odio de los católicos oponiendo continuamente dificultades y trabas a los fieles». A estos conflictos, alimentados y reseñados por el autor del Memorial de los mártires, se sumaba la inestabilidad de las fronteras del norte, algunas auto-proclamaciones de pseudo emiratos en Sevilla o Mérida, rebeliones e incursiones continuas y el aumento de las críticas.

Es entonces cuando Muhammad I opta por el reforzamiento de las fronteras y la construcción de atalayas defensivas en Al-Ándalus. En 854 y cerca la frontera norte de la capital de Toledo, coloca los primeros sillares de una fortaleza militar: la primera piedra de Mayrit (el Madrid actual). En torno a la atalaya se levantarían entre otros edificios importantes, la mezquita de la almudaina (pequeña ciudadela), donde se alzó luego la iglesia de Santa María de la Almudena, o las dependencias del cadí, solar ocupado hoy por el Palacio Real.

En la primavera de 859, tras la ejecución de San Eulogio, la rebelión mozárabe empieza a remitir; pero la calma relativa se difuminó al año siguiente con la presencia del muladí Omar ben Hafsún. El rebelde hispano-visigodo, definido por Dozy como el «José María del siglo IX», se levantó desde tierras malagueñas contra el emir, llegando en ocasiones a las mismas puertas de Córdoba en una insurrección que duraría medio siglo y no se subsanaría hasta el reinado de Abderramán III, con la muerte, por causa natural, del líder muladí.

Dejó su sello en la Mezquita, al concluir en el 885 las obras de la primera ampliación iniciadas por su padre; colocó ante el nuevo mihrab la maqsura o zona acotada para la oración del emir y su séquito, y reparó el primer templo alzado por Abderramán I.

De entre sus 33 hijos y 21 hijas, al-Mundhir, nacido de la esclava cristiana Ailo, le sucedió tras su muerte, acaecida el 4 de agosto de 886. Después de haber gobernado los destinos de Al-Ándalus durante 34 años, fue enterrado, como sus antepasados, en la Rawda Califal, perdida bajo el cemento de los Santos Mártires. El quinto emir cordobés, que no tiene calle ni monumento en su ciudad, luce su nombre en un parque de la capital de España; en el Madrid que fundó y se enorgullece de su legado andalusí.

Fuente: El Día de Córdoba

Barrio Guadalquivir

Las obras del parque Guadalquivir comenzarán el próximo mes

Los vecinos aseguran que el proyecto es «muy necesario», por lo que se muestran satisfechos

La Asociación de Vecinos Nuevo Guadalquivir se mostró ayer satisfecha ante el inminente inicio de las obras del parque del Guadalquivir, situado en la calle Libertador Carrera y O’Higgins. La presidenta de este colectivo vecinal, Ángeles Muñoz, aseguró que las obras comenzarán el próximo mes según les detalló ayer el concejal de Infraestructuras, Francisco Cárdenas, en una reunión que mantuvo con el colectivo. Esta zona verde, de unos 8.000 metros cuadrados, era una reivindicación «histórica en el barrio», ya que «su adecentamiento era necesario desde hace más de una década», pero no fue hasta hace cuatro años, que se constituyó este colectivo vecinal, cuando «se comenzó a reivindicar de forma persistente».

La obra que se va a desarrollar en este parque va a cambiar por completo su actual fisonomía, ya que «se va a sembrar césped, se harán acerados, una zona infantil, además de cambiarse los árboles», manifestó Muñoz, quien aseguró que esta remodelación supondrá una inversión de más de 280.000 euros, los cuales se financiarán con el fondo estatal de inversión local. «Estamos muy satisfechos, porque el proyecto es muy bonito, parecido al que se hizo en los jardines de Conde Vallellano o Duque de Rivas», apuntó la representante vecinal, quien destacó que «aún queda mucho por hacer en el barrio, pero vamos paso a paso». En este sentido, Muñoz manifestó que Cárdenas también se comprometió en la mencionada reunión a que la obra del pasaje perpendicular a la calle Libertador Juan Rafael Mora, esquina con Libertador Sucre, incluya «bancos y un parque infantil», ya que es una «zona de encuentro familiar que sin estos equipamientos no se puede disfrutar igual».

Fuente: El Día de Córdoba

Poemas que brotan de la ciudad

Una quincena de niños del colegio Jerónimo Luis de Cabrera participa en un taller de CosmoArte

Una mirada a la poesía desde el arte actual es el lema de CosmoArte, un programa paralelo a Cosmopoética 2009 al que ayer acudió una quincena de niños de quinto de Educación Primaria del Colegio Público Jerónimo Luis de Cabrera. La actividad, titulada Mi primer poema visual, consistió en «encontrar la poesía que hay en la ciudad y que pasa desapercibida para los pequeños», aseguró María Ortega, artista plástica y monitora del taller. De este modo, los niños recorrieron cada rincón de la plaza Colón en busca de «letras que sirvan para realizar versos y, finalmente, un poema». Así, Sandra Moral, Alba Pizarro, Rosa, Gregorio Ruiz o Carlos, entre otros, se afanaron en sacar moldes de cada una de las letras que encontraron en las tapas de las alcantarillas, del alumbrado, en los árboles… Los menores reconocieron que la tarea iba a ser «complicada», teniendo en cuenta que «no hemos encontrado todo el abecedario, sólo las letras que componen Ayuntamiento de Córdoba y alumbrado público», señaló Rosa. Por su parte, el coordinador de CosmoArte, Miguel Ángel Moreno, mencionó que este taller forma parte de un programa repleto de actividades con las que «acceder a la poesía desde su parte más artística».

Un ejercicio también de paciencia, creatividad, habilidad manual y artística para los pequeños que resultó ser una sorpresa, «porque no sabían a qué venían al centro para esto», indicó la tutora de este curso, Adriana Porcuna, quien destacó los conocimientos que este taller les va a aportar a los menores. «Van a necesitar sacar todo su potencial creativo para poder confeccionar un poema, además de sus habilidades plásticas para hacer los moldes de las letras con la pasta moldeable», añadió. Una jornada en la que los niños se lo pasaron «en grande», no sólo porque dejaron los libros por un día, sino también porque «las manualidades son lo mejor del cole», apuntó una de las menores.

Algunos niños lograron escribir su nombre y otros consiguieron escribir pequeñas frases por lo que la actividad resultó ser un éxito, sobre todo porque los pequeños entendieron que «en cada calle de la ciudad hay poesía visual si observan con atención los mensajes que hay en carteles, pintadas, etcétera», apuntó Moreno. Finalmente, y entre todos, lograron escribir un poema: «Buscando letras imaginamos en este día de poesía, con la pasta amasamos y un poema modelamos», que se exhibirá en la Casa Góngora, manifestó Ortega, quien recordó que «la poesía visual es toda aquella que no leemos sino que vemos a través de objetos».

Fuente: El Día de Córdoba

XXV Jornadas por la Paz

Reclusos disputan un trofeo de tenis de mesa en las Jornadas por la Paz del Distrito Sur

LAS JORNADAS por la Paz del Distrito Sur acogieron ayer varias actividades deportivas como el Trofeo Solidaridad de Tenis de Mesa y las competiciones de voleibol y fútbol sala. Internos de la prisión provincial y jugadores del Club Tenis de Mesa del Distrito Sur disputaron el vigésimoquinto trofeo de tenis de mesa en el colegio público Andalucía. A este acto de convivencia asistieron los familiares de los reclusos. Por otro lado, las competiciones de voleibol y fútbol sala tuvieron lugar en el Colegio Córdoba.
Fuente: Diario Córdoba
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