Barrio la Guita

Los vecinos de la calle Loja volverán a sus casas en seis meses tras su rehabilitación

Vorsevi inicia los trabajos para colocar una tubería en la calle que drene las aguas y evitar así la aparición de más grietas

Más de dos años después de que los vecinos que vivían en el bloque 36 de la calle Loja tuvieran que abandonar sus casas por riesgo de derrumbe, han comenzado por fin las obras de rehabilitación en el edificio. Los representantes de las tres administraciones implicadas en el proyecto (Ayuntamiento, Junta de Andalucía y Subdelegación del Gobierno) se reunieron ayer en este enclave del Sector Sur para informar del inicio de los trabajos que finalizarán, si todo va según lo previsto, dentro de unos seis meses, periodo tras el cual los afectados podrán volver a sus pisos. Hasta ese momento, las ocho familias que fueron desalojadas en marzo de 2007 seguirán instaladas en las viviendas que les facilitó Vimcorsa.

La obra dará al barrio la «estabilidad» que demandaban los vecinos, según apuntó el delegado de Vivienda de la Junta de Andalucía, Francisco García, ya que los estudios elaborados por la Administración autonómica han concluido que el suelo de esta calle «está preparado para soportar estos edificios». En un principio, se pensó que era la propia composición del terreno, a base de arcillas que se contraen cuando no reciben agua y se expanden cuando ocurre todo lo contrario, lo que provocaba las grietas. Ahora, según apuntó García, bastará con la instalación de una tubería que recogerá el caudal que baja desde la zona alta del Sector Sur e impedirá que, mediante una pared impermeable, el agua acceda a la parte baja de los inmuebles para mantener su conservación. Estos trabajos de drenaje «evitarán que aparezcan nuevas fisuras tanto en el bloque 36 como en los colindantes», apuntó el delegado. Precisamente el pasado mes de marzo, un grupo de vecinos del edificio contiguo al desalojado denunció la existencia de grietas en sus casas y manifestó su temor a un «efecto dominó». A este respecto, desde la Subdelegación se apuntó que el hecho de no tener que derribar ningún edificio es una «buena noticia», ya que el Patronato de Huertos Familiares (que preside el titular de esta institución) «siempre luchó por evitar la demolición».

Además de las obras de mejora de la estructura y cimentación, la Junta de Andalucía -a través de los fondos Proteja- prevé una inversión de 7.000 euros por cada una de las ocho viviendas para «recuperar sus condiciones de habitabilidad», según apuntó el gerente de Vimcorsa, Rafael Obrero. El presupuesto total de la obra de drenaje -que acometerá la empresa contratada, Vorsevi- es de 103.000 euros. Hay que tener en cuenta que estos trabajos se iniciaron ayer. Los vecinos de los inmuebles han manifestado su descontento ante la situación, que parecía prolongarse indefinidamente sin que empezaran los trabajos.

Anabel Calero enlace a El Día de Córdoba

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