Noche Blanca en el Sur
Colectivos vecinales critican el reparto de las barras de la Noche Blanca
Cuatro asociaciones del Sector Sur pidieron explicaciones al Ayuntamiento hace un mes sobre los criterios usados y todavía están a la espera de una respuesta
Cuatro de las seis asociaciones de vecinos que hay en el Sector Sur remitieron el pasado 22 de junio una carta al Ayuntamiento en la que pedían explicaciones por los criterios seguidos a la hora de adjudicar las barras que hubo repartidas por este distrito durante la Noche Blanca del Flamenco. La misiva está rubricada el lunes siguiente a la celebración de este multitudinario acto cultural y festivo y ninguno de los cuatro colectivos firmantes -Amargacena, Puente Romano, Huertos Familiares y Nuevo Guadalquivir- ha recibido aún respuesta del Gobierno municipal.
Para la presidenta de la Asociación de Vecinos Amargacena, Isabel Márquez, el criterio seguido por la organización de la Noche Blanca ha sido repartir las autorizaciones de las barras «a dedo, a quienes ellos han querido». Fue el mismo 20 de junio cuando estos cuatro colectivos tuvieron noticias de que las asociaciones de vecinos La Unidad y Guadalquivir, habían sido beneficiadas con esta concesión que les permitiría obtener unos ingresos extras para sus actividades.
Al igual que Márquez, la responsable de la Asociación de Vecinos Puente Romano, Carmen Sevilla, también subraya que se han adjudicado a «a dedo» y esperará al próximo lunes a contar con una explicación de lo ocurrido por parte del Área de Presidencia, que encabeza la edil Rosa Candelario; en caso contrario, «volveremos a mandarles otra carta o a darles un toque de atención». Lo que quieren los cuatro colectivos del Sector Sur es participar por igual en la Noche Blanca y que todos tengan las mismas oportunidades. Para la presidenta de la Asociación Nuevo Guadalquivir, María Ángeles Muñoz, cualquiera de estos colectivos cuenta con infraestructura y personal suficiente para hacerse cargo de la barra durante las horas que hiciera falta en la Noche Blanca. «Tenemos material de todo tipo y así se demuestra cada año cuando celebramos el día vecinal del distrito», explicó.
Muñoz confía en que esta situación no se repita en la próxima edición de la Noche Blanca, puesto que «el distrito y la junta municipal no deben quedarse quietos». Es más, la presidenta de Nuevo Guadalquivir se cuestiona para qué sirve la estructura de participación ciudadana del Consistorio, «qué pinta el distrito si ellos son los primeros que le dan capotazo».
Una de las carencias de la primera Noche Blanca del Flamenco fue la escasez de puntos donde adquirir comida y bebida durante la madrugada. Para este año, el Ayuntamiento acordó con Hostecor la apertura de más bares y tabernas, así como la instalación de barras en plena calle para atender la necesidad de las miles de personas que vivieron este acto.