La representación de la solidaridad

Los alumnos del Instituto Santa Rosa de Lima muestran los valores sociales con una representación

La generosidad, el respeto y la educación son valores que tienen que estar presentes en todas las personas. Educar es una tarea que comparten la familia y la escuela que, a través de diversas iniciativas, intentan inculcar a los alumnos unos hábitos de conducta responsables. El Instituto de Educación Secundaria Santa Rosa de Lima celebra estos días la Semana de la Solidaridad donde, a través de una amplia programación los estudiantes aprenden el significado de palabras como «respeto, generosidad, ayuda o compromiso», según explicó ayer el director del centro, Alfonso Rodríguez. Ayer, los alumnos de segundo de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) participaron en un juego teatral, La niña araña, donde se cuenta la historia de alguien que necesita de la ayuda de los demás. Durante toda la semana también habrá música, monólogos, charlas y talleres dedicados al comercio justo y al consumo responsable.

La Semana de la Solidaridad se celebra desde hace diez años y los alumnos «responden muy bien», según Rodríguez. Y es que, «los profesores muchas veces no sabemos cómo hacer llegar a los estudiantes» este tipo de cuestiones, afirmó el director. La programación está elaborada por personas que forman parte de ONG y «aportan otra visión». Los estudiantes estuvieron ayer muy pendientes durante la mañana del juego teatral «porque te hace pensar», como le ocurrió ayer a Fran, uno de los estudiantes que participó en la actividad. Sus compañeros coincidieron en que «muchas veces no nos damos cuenta de que nos portamos mal», reconoció Rocío.

Esta iniciativa está promovida por el Ayuntamiento y se trata de un complemento más para la formación de los alumnos. Durante estos cinco días, también habrá un mercadillo donde se podrán comprar artículos de comercio justo, desde piezas de decoración hasta alimentos. Una semana de convivencia para mejorar en otros aspectos de la educación que a veces se pierden entre los apuntes y exámenes.

Fuente: El Día de Córdoba